Un 14% de los ciudadanos ha cerrado una compraventa de un vehículo a través de whatsapp, según el informe ‘Españoles ante la nueva movilidad’ elaborado por el Centro de Demoscopia de Movilidad. Esta cifra supone un aumento de 2,5 puntos respecto al año 2017. Y pone de manifiesto la transformación digital que están sufriendo los concesionarios y los procesos de ventas de automóviles.
Esta cifra, que a priori puede parecer elevada. En realidad no lo es si tenemos en cuenta los resultados del último ‘Estudio Anual de Redes Sociales 2017’ elaborado por IAB Spain. En la cual se refleja que los españoles dedicamos, de media, más de 5 horas al día a WhatsApp. Por tanto, la tendencia natural es que los vendedores comiencen a explotar aún más ese canal de comunicación al que estamos tan “enganchados”.
El informe ‘Españoles ante la nueva movilidad’ arroja más datos reveladores. Como, por ejemplo, que el 22,2% de los españoles estaría dispuesto a adquirir un coche nuevo sin verlo o probarlo en persona. Esto demuestra el auge de las redes sociales y los foros como lugares con influencia en las opiniones de las personas. Pero especialmente llamativo es que el 32,3% de los encuestados considera que no es imprescindible acudir al concesionario para comprar un vehículo.
La venta digital de automóvil es una realidad para la que parecen estar más preparados los consumidores que, en muchos casos, los fabricantes y su red de concesionarios. El hecho de que uno de cada tres potenciales consumidores no considere imprescindible la visita al concesionario como parte del proceso de venta evidencia la tendencia a que este sea considerado como un mero entregador de vehículos.
Estamos en un cambio de paradigma en el que el concesionario necesita aportar valor a los clientes si no quiere desaparecer del proceso de venta. No debemos olvidar que somos seres sociales y, por tanto, necesitamos y agradecemos ese contacto humano con los que nos rodean. Es tarea del concesionario continuar siendo necesario para un cliente que busca la comodidad (digital), pero valora el trato cara a cara.