Últimamente todo el mundo coincide en hablar de la dificultad de encontrar personal.
Aunque las previsiones económicas invitan a ser conservadores con pronósticos no del todo esperanzadores, la realidad es que el presente muestra signos de fortaleza e invita a las empresas a rodearse de buenos trabajadores para aprovechar que el viento sopla a favor. Y este problema afecta tanto a grandes como a pequeñas y medianas empresas.
¿Por qué es tan difícil encontrar personal?
Desde nuestro punto de vista profesional, y dada nuestra experiencia como empresa de selección de personal y reclutamiento, creemos que la situación se debe múltiples razones. Entre ellas, podemos destacar las siguientes causas:
- En primer lugar, la caída del desempleo que llevamos observando durante los últimos meses. Actualmente, hay provincias y comunidades con tasas de desempleo inferiores al 10%.
Esto significa, que, en algunas actividades, perfiles profesionales y edades, casi se da un pleno empleo. Por tanto, quien quiere contratar, se ve en la necesidad de atraer talento y no solo seleccionar.
- En segundo lugar, es común que la mayoría de las empresas busque perfiles parecidos en cuando a edad. La gran mayoría de las compañías requiere perfiles jóvenes con proyección, más allá de una formación concreta, que en muchos casos también.
Este hecho favorece que muchos perfiles senior se vean arrinconados y con poca capacidad de demostrar su valía profesional y su experiencia.
- En tercer lugar, muchos empresarios siguen teniendo la visión, cada vez más obsoleta, de las relaciones laborales en las que se intercambia mano de obra por salario. Somos testigos de cómo se está imponiendo una nueva regla que avanza hacia el intercambio de talento por proyecto profesional y salario.
La realidad es que los más jóvenes han interiorizado que tienen la opción de elegir. Y, si les ofreces un proyecto ilusionante con buenas condiciones de vida laboral (flexibilidad, teletrabajo, etc.) y un salario de mercado, los puedes atraer y contratar; pero, si no, se complica llegar a un acuerdo contractual.
- En cuarto lugar, cabe mencionar la (poca) profesionalidad a la hora de reclutar talento por parte de algunas empresas. Una red profesional como linkedin está llena de anuncios para perfiles que no existen en esa red social y sin ningún atractivo.
Del mismo modo que todos los españoles tienen dentro un seleccionador de futbol, todo el mundo cree saber seleccionar a un futuro empleado. Gran error. Reclutar, seleccionar, evaluar, contrastar, solicitar referencias, etc., es un proceso complejo poco apto para aficionados y que solo saben hacer (con éxito) profesionales especializados.
¿Qué nos puede deparar el futuro de la selección de personal?
Es un tema muy amplio en el que influyen cantidad de factores, tanto económicos como generacionales y estructurales, cuya evolución estará también condicionada por cómo avancen estas áreas.
A nivel económico no nos atrevemos a hacer ningún pronóstico porque nuestra área de especialidad es otra y tampoco los expertos se ponen de acuerdo en este asunto.
Respecto al ámbito de las personas, entendemos que, en el futuro, se verá reforzado este cambio de tendencia en las relaciones laborales, sobre todo con mayores cuotas de trabajadores pertenecientes a una Generación Z que hoy se está incorporando al mercado laboral con estos requisitos.
Estos jóvenes de hoy en día priman, incluso por encima del salario, aspectos como el desarrollo de la persona, la calidad de vida laboral, la conciliación, etc. Pero tampoco conviene olvidar que todo ello debe estar combinado con una responsabilidad productiva, unos estándares elevados de atención al cliente y, por supuesto, con los resultados de la empresa.
Lo demuestran las investigaciones de la psicología social: la gente feliz y valorada es más productiva, se implica más con el trabajo y la empresa, atiende y trata con mayor eficacia a los clientes y contribuye a sumar en el éxito de la empresa.